Sin máscara

Alfredo Gómez Cerdá.
Novela romántica.
         Roberto, un chico de diecisiete años, toca el violín. Es el hijo modelo de toda familia, pero la familia cambia de parecer cuando, gracias a una mesa, conoce a Luna. Ella es muy distinta a la clase de persona que es Roberto y su familia, y así se dará cuenta de la hipocresía que hay en el mundo, donde cada persona no es lo que parece.
Roberto toca el violín, y eso es motivo de burla para sus compañeros de clase. Un día encuentra un comentario en la sala de vídeo que resulta ser de una chica. Al conocerse,Roberto se da cuenta de que tiene una vida distinta. Ella vive en Carabanchel, un barrio de mala fama, y Roberto vive en Chamberí, un barrio ``para pijos´´.
Sibi, amigo de Luna, cogen ``prestada´´ la moto del primo Santi, primo de Roberto.
Luego le devuelven la moto, pero a los dos días, Santi denuncia a Sebi de robarle otra vez la moto.
Roberto, Luna y Mocolindo, otro amigo de Luna, piensan que algo raro está pasando y deciden investigar a Santi.
Así descubren que Santi trafica con drogas y debe mucho dinero, por eso ha hecho que le han robado la moto y la va a vender en un taller clandestino. Al descubrirlo Roberto decide contárselo a la familia para que ayuden a Santi y dejen en libertad a Sebi. La familia piensa que ``lo hecho, hecho está´´ y deciden dejar las cosas como están. ``Es más fácil que un chico de tan mala influencia llegue a la cárcel, que un chico como Santi.´´
Roberto decide contarle lo que sabe a la policía y su familia lo manda a Chicago, donde está una de las mejores escuelas y el mejor maestro para el violín. Roberto no quiere irse, ya que su familia está haciendo todo esto para separarlo de Luna. Al final, Luna lo convence para irse y cuando va al aeropuerto para despedirse de él, Luna escribe unas palabras que para ellos dos significan mucho:
TE QUIERO, VIOLINISTA.

      Ver que en el mundo las personas que dan consejos y dicen que una cosa está mal, a la hora de hacerle frente se esconde y obra por hipocresía, solo para él o, en este caso, solo para la familia aunque se esté cometiendo una injusticia al mandar a un inocente en la cárcel.

      No sabría que decir. Me gusta todo en estos libros, porque cualquier detalle me hace pensar.
    Se la recomendaría a todos, y no solo a los adolescentes sino también a los adultos, porque a veces uno no entiende que está obrando mal. Con este libro a uno le pueden abrir los ojos.